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jueves, 11 de junio de 2015

MONSTERS UNIVERSITY. Mike y Sully, el origen.


MONSTERS UNIVERSITY

Dan Scanlon, 2013

No sólo el público general esperaba con gran anticipación esta cinta.  También lo hacía la crítica y los fans de la primera parte, así como quienes somos fans del trabajo de Pixar.  La percepción general de las precuelas (o secuelas, para el caso) tardías es que suelen ser innecesarias o incluso terribles como Star Wars: Episodio I: La amenaza fantasma (Lucas 1999), y se temía que Pixar hubiese caído en la epidemia de secuelitis. Como antecedentes, la compañía de animación tenía la bien lograda trilogía de Toy Story (1995-2010) y la fallida secuela Cars 2 (2011) ‒aunque la película original ya era bastante mediocre‒. Así las cosas, ¿Monsters University se uniría al montón de secuelas/precuelas innecesarias o sería una verdadera evolución de la primera parte?
    Básicamente, la película narra la historia de Mike Wazowski (voz original de Billy Crystal) y cómo su mayor ilusión desde que era un pequeño monstruito fue convertirse en Asustador (monstruos encargados de cosechar gritos de niños para llevar energía a Monstruópolis), a pesar de que su aspecto no asusta a nadie. Mike crece hasta que llega el momento en que entra a estudiar a la prestigiosa Monsters University. Mike se esfuerza por cumplir su sueño; pero otro estudiante, flojo y fanfarrón, llamado James Sullivan (voz original del genial John Goodman) le hará ver su suerte y aprender un par de cosas sobre la vida en el campus.

    Pixar logró lo que George Lucas y la versión de Nickelodeon de las Tortugas Ninja nunca pudieron entender: es tan valioso conservar al público original como tratar de captar al nuevo. Aunque Monsters University sí es una película para un público infantil, en realidad su mensaje y su subtexto están mucho más orientado a los adultos… Sacando cuentas, muchos de los niños que disfrutaron la primera entrega deberían ser universitarios para estas fechas.
    Si algo puede alabarse de las secuelas de Pixar (exceptuando la citada Cars 2 y las películas de Campanitatinkerbell) es que han sabido crecer con su público. Los guionistas han tenido esta sensibilidad magistral para captar las preocupaciones de su audiencia. A los cinco años nos preocupaban los monstruos en el clóset, a los dieciocho nos preocupa no cumplir con las expectativas, ya sea de nuestra familia, amigos, profesores o, incluso, de nosotros mismos.
    Así pues, esta película no habla sobre “luchar para alcanzar tus sueños”, sino que hace un llamado a los adolescentes y jóvenes adultos a luchar para encontrarse a ellos mismos. Además, todo aquél que haya estudiado en una universidad en algún momento de la vida se sentirá identificado con las situaciones por las que tienen que atravesar Mike y Sully, así como con los demás personajes de la película porque (el típico) ¿quién no tuvo compañeros así en la Facultad?

    También el apartado técnico es asombroso. Vi esta película en formato 3D, aunque no creo que le haga falta (vamos, no es Avatar [Cameron, 2009]), y luce sensacional. Tanto la calidad de la animación como las texturas y las fuentes de luz que en ella se muestran son ricas y detalladas. Casi se puede ver cada pelo de Sully moverse por separado; se nota drásticamente el adelanto de la tecnología en la pasada década.
    El diseño de los personajes también es bastante acertado. Se ve que los artistas encargados de este rubro partieron desde de cero para dotar a los monstruos de una apariencia juvenil, en lugar de tomar los modelos que ya habían hecho y sólo cambiarlos. Todo es nuevo y diferente ¿Alguien notó en la primera Monsters, Inc. (Docter, et al., 2001) que Mike tenía escamas? ¡Pues las tiene!

    El único pero que sí le encontré a la cinta fue que la narrativa es poco original, pues cae en los lugares comunes de las películas estudiantiles de los 80. Por momentos se vuelve muy parecida, aunque con mucho más contenido y muchos menos chistes vulgares eso sí, a La venganza de los nerds (Kanew, 1984). Este es en realidad un fallo menor, ya nadie recuerda La venganza de los nerds (y eso que fueron cuatro películas a lo largo de diez años). También hay por ahí un par de guiños  las películas de “terror en el bosque” de la misma década, pero esas secuencias son geniales.
    En conclusión, se trata de una muy buena película: sencilla, con cierta profundidad y muy divertida (me la pasé riéndome). Aunque sí debo decir que quizá no sea del agrado de los niños más pequeños, pues con una duración de una hora con cuarenta y cinco minutos y una temática más orientada hacia un público adulto, podría resultarles poco atractiva o incluso aburrida; de hecho, en la función a la que yo fui sí hubo varios niños aburridos.


PARA LA TRIVIA: Pixar surgió originalmente como la división de animación de Industrial Light and Magic, la compañía de efectos especiales de George Lucas.


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