“¡Hola, espectritosssss!”
Soy yo, su amigo el Cinéfilo Incurable. En esta ocasión, para celebrar la Noche
de Brujas y conmemorar el trigésimo quinto aniversario del estreno de Halloween he decidido escribir este
especial en el que comparto con ustedes mis críticas sobre las diez películas que
conforman dicha saga.
HALLOWEEN
John Carpeter, 1978
En la noche de Halloween de
1978, Laurie Strode (el debut de Jamie Lee Curtis, quien se convertiría en la Scream Queen por antonomasia), chica
impopular y tímida, trabaja como niñera cuidando a sus pequeños vecinos en el
pueblo de Haddonfield, Illinois. Lo que Laurie no sabe es que el demente
Michael Myers, asesino psicópata institucionalizado desde los seis años tras
asesinar a su hermana adolescente, se ha escapado del manicomio en el que
estaba encerrado y se ha propuesto celebrar la Noche de Brujas regresando a su
antiguo vecindario de Haddonfield.
Sin duda alguna, Halloween es una de las obras maestras del cine de horror; por no
mencionar que representa la culminación del proceso evolutivo del cine Slasher
que empezara con Psicosis (Hitchcock,
1960) y “madurara” con La masacre deTexas (Hooper, 1973). Esta película, el tercer largometraje dirigido por el
ahora legendario Carpenter, sería el modelo a seguir por todos los Jasons,
Freddys, Benjamin Williams, Ghostfaces e incluso Leatherfaces por venir; se
convertiría en el cimiento sobre el cual se construyó todo un subgénero.
Es destacable el carácter moralista que
rige el fondo de esta película. A final de cuentas, se trata de un melodrama
precautorio que busca transmitir los valores de la burguesía estadounidense. Las
víctimas de Myers (y de los slashers por venir) son siempre los jóvenes que
consumen drogas o se alcoholizan o, mejor aún, quienes tienen sexo
premarital. Es notorio cómo el asesino
enmascarado satisface su frustración sexual asesinando muchachas atractivas y,
de preferencia, desnudas.
Una historia sobre los hermanos celosos, Halloween es también una metáfora sobre
la sociedad clasemediera estadounidense, tan obsesionada por reprimir su
sexualidad; y en otra lectura, es una especie de Moby Dick contemporáneo, pues se
trata de la historia de un hombre, el Dr. Sam Loomis (papel que inmortalizaría
al siempre excelente Donald Pleasence) tratando de contener a una fuerza más
poderosa que él, un asesino a quien él mismo se refiere como un Gran Tiburón
Blanco Humano.
Una película de autor, Halloween se convirtió rápidamente en un clásico y a la fecha
podría considerársele una especie de Piedra de Rosetta para los fobocinéfilos.
PARA
LA TRIVIA: Originalmente, el departamento de arte había
diseñado una máscara mucho más elaborada para Michael Myers; sin embargo, la
producción de la cinta tuvo que recortar presupuesto y dicha máscara nunca se
produjo. A última hora, el director John Carpenter sacó los billetes que
llevaba en la cartera y se los dio a un miembro del staff para que fuera a una
tienda y comprara una máscara de Halloween. El enviado volvió al poco rato con
una máscara del capitán Kirk de Viaje a las Estrellas (Star Trek), pues fue lo
único que pudo encontrar; pero Carpenter decidió pintar la máscara con aerosol
blanco y usarla de todos modos. El resto es historia.
HALLOWEEN
II
Rick Rosenthal, 1981
Retomando exactamente donde
finalizó la primera entrega de Halloween,
esta secuela continúa con la historia del asesino psicópata Michael Myers,
quien no murió en la peli anterior y sigue al acecho en la otrora tranquila
comunidad de Haddonfield, Illinois. Mientras el marcador de víctimas aumenta,
el Dr. Sam Loomis (Donald Pleasence) busca al asesino enmascarado en medio de
un pueblo llevado a la histeria colectiva y Laurie Strode (Jamie Lee Curtis),
única sobreviviente del ataque de Myers, es trasladada a un hospital que se
convertirá en un baluarte de pesadilla en la batalla contra Myers.
Bien dice el dicho que “segundas partes
nunca fueron buenas” y en este caso se cumple a la perfección. Esta película no
es mala de por sí, pero sí es mucho muy inferior a la original. Carpenter cede
la silla de director para ocuparse del guión y la producción de esta secuela
que se sale bastante del plan original del director (me explicaré más
adelante).
No es tan mala película, pero me parece un
tanto frívola. Me refiero a que sí logra crear atmósfera y suspenso y la
fotografía en marcados claroscuros le ayuda a crear un tono bastante
terrorífico; sin embargo, esta cinta parece mucho más preocupada por la forma,
por copiar los recursos y técnicas de la primera entrega, que por crear un
lenguaje propio.
La genialidad de la película original está
ausente en ésta, que no es mala mala; pero toma los elementos de la primera
parte y los convierte en clichés, además de que no hay subtexto alguno en ella.
Si la Halloween original era una
crítica social, esta secuela es un cuento de espantos y no mucho más.
Un elemento que es añadido a la mitología
de la saga y que es interesante es la revelación de que SPOILER Laurie Strode es la hermana biológica de Michael Myers TERMINA SPOILER y ésa es la razón por
la que el asesino psicópata está obsesionado con matarla. Otro gran acierto es
la confrontación climática entre el Dr. Loomis, Laurie Strode y Myers, y su
explosivo desenlace.
Y como dato curioso: ¿Conocen esa leyenda
urbana acerca de gente malintencionada que ocultaba navajas de afeitar dentro
de los dulces que daba a los niños en Halloween? Bueno, pues en esta peli hay
una escena que le rinde tributo.
Por cierto, no sé qué tiene o cómo hicieron
la máscara de Myers, pero algo tiene que no me gusta… quizá es que se ven
demasiado los ojos del actor...
PARA
LA TRIVIA: En 1983 la compañía Wizard Video lanzó el videojuego Halloween, basado en la primera cinta,
para la extinta consola casera Atari 2600. Dicha compañía ya había producido
anteriormente el videojuego de The Texas
Chainsaw Massacre, para la misma consola… de hecho, el Game Engine en ambos
es casi el mismo y ambos son juegos bastante sangrientos (tanto como podían
serlo en aquella época).
HALLOWEEN
III: EL IMPERIO DE LAS BRUJAS
Halloween III: Season Of The
Witch
Tommy Lee Wallace, 1982
Según nosotros los fans,
esta película más bien debió llamarse ¿Y…
dónde está Michael Myers? Pues su característica principal es precisamente
la ausencia del psicópata enmascarado enfundado en un mono de mecánico… Bueno,
sí aparece, pero sólo en una especie de cameo en una pantalla de televisión. A
pesar de ser considerada por la mayoría de los fanáticos como la peor entrega
de la serie, contrario a lo que parecería, esta entrega está mucho más cercana
a la idea original que John Carpenter, creador de la franquicia, tenía sobre
ella.
El plan de Carpenter al crear Halloween era que se tratara de
películas independientes, que contaran cada una una historia diferente
relacionada con la Noche de Brujas y que se estrenaran a razón de una por año.
Sin embargo, fue el éxito de la historia de Michael Myers y Laurie Strode lo
que motivó a los productores a sacar la secuela de 1981.
En Halloween
III: El Imperio de las brujas se narra la historia del Dr. Daniel Challis
(el fabuloso Tom Atkins, siempre estrella de películas de acción en los 80)
que, de forma fortuita, se ve involucrado en una investigación contra la
empresa fabricante de máscaras de Halloween Silver Shamrock Novelties. Según lo
descubre Challis, el empresario dueño de Silver Shamrock, Conal Cochran (el
también genial Dan O´Herlihy, a quien tal vez recuerden como presidente de la
compañía OCP en Robocop: El defensor delfuturo [Verhoeven, 1987]), es un gran bromista y tiene planeada la más
grande broma de todas para este Halloween: El sacrificio de millones de niños
alrededor del mundo a través de las máscaras que produce su compañía.
Y esta película es una de ésas que uno las
ve y no puede evitar preguntar “¿Qué rayos es esto?” la primera parte es un
thriller más o menos decente con algunas escenas de horror bastante logradas.
La segunda parte decae rápidamente y termina convirtiéndose en un folletín de
aventuras que va saltando entre situaciones cada vez más inverosímiles que
incluyen androides asesinos y magia celta (no, es en serio). De hecho, la
pregunta más común sobre esta película en las FAQ´s de IMDB.com es “¿Qué pasa
al final?” de lo que se deduce que poca gente la ha soportado completa.
Tal vez no parecería tan mala si no se toma
en cuenta que es parte de la saga de Halloween…
¡Nah! ¿A quién engaño? Sí es mala, y es peor porque no sale Myers. Digo, trato
de comprender lo que trataron de hacer con esta peli y he de conceder que tiene
algunas escenas interesantes y que regresa el subtexto de la crítica social
(que en este caso versa sobre la tecnología y la enajenación de las nuevas
generaciones con los medios masivos de comunicación), pero sus carencias son
obvias y echan por tierra los contados aciertos que tiene.